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| Xalapa, Ver. | 26 Sep 2024 - 20:42hrs
Paola Cortés Pérez
Fotos: Omar Portilla Palacios
Xalapa, Ver., 26/09/2024. Estudiantes de diversas instituciones de educación superior (IES) del país reflexionaron sobre la literatura homosexual en México, en los siglos XX y XXI, en la Mesa “Representación LGBTTTIQA+ en la literatura contemporánea”, organizada por la Facultad de Letras Españolas y el Instituto de Investigaciones Lingüístico-Literarias (IIL-L) de la Universidad Veracruzana (UV).
En el evento realizado en el Auditorio “Jesús Morales Fernández” de la Unidad Académica de Humanidades de esta casa de estudios, participaron: Leonardo Gabriel Islas Navarrete, de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP); Óscar Gudiño Juárez, docente en el Colegio de Bachilleres del Estado de Puebla; Héctor Justino Hernández Bautista, egresado de la Licenciatura en Lengua y Literatura Hispánicas de la UV, y Francisco Ramón Castro Hernández, del Centro de Estudios Superiores de México y Centroamérica (Cesmeca) de la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas (Unicach).
En la ponencia “Subjetividades homosexuales en la literatura mexicana de la segunda mitad del siglo XX”, Leonardo Gabriel Islas dijo que a partir del análisis y reflexión de las obras 41 o el muchacho que soñaba con fantasmas, Las picardías de Goyo Momo y El diario de José Toledo, identificó cuatro subjetividades en los personajes: el homosexual arrepentido, el autodespreciable, el monógamo y el autoaprobado.
De manera general, a través del análisis concluí que la literatura homosexual del siglo XX tiene muchas subjetivaciones, no nos damos cuenta de nuevas subjetividades sino de copias heteronormadas; hay una autoaprobación, pero sólo después de un sufrimiento.”
Óscar Gudiño en su participación intitulada “Los personajes LGBTTTIQA+ en la novela histórica mexicana del siglo XXI”, explicó que la novela histórica se caracteriza por recrear un periodo histórico real, con personajes y eventos que pueden ser reales o ficticios, esto la diferencia de la novela de aventuras o sentimental del siglo XXI.
En las novelas Yo, la peor; La insurgenta; La conspiradora; Pobre Patria mía o Los pecados de la familia Montejo, dijo que se puede observar que tienen un hilo conductor: la culpa, la idea de pecado, el sentimiento negativo, que forman parte de los personajes que viven su sexualidad y tienen una visión del mundo diferente; sin embargo, la mayoría de los personajes tienen una actitud diferente al del mundo contemporáneo.
Finalmente, Héctor Hernández en su ponencia “El personaje gay en la novela House: retratos desarmables de Sergio Loo”, que es extracto de su tesis de titulación, da cuenta de una tradición de la literatura gay mexicana que en su momento –1997– se entiende como “la ideología de las costumbres” y las emociones de los homosexuales con las que aborda cualquier tipo de costumbres o sentimientos con esta mirada, comportamiento, lenguajes y signos con los que se ha construido una cultura homosexual.
“La forma de representar a un personaje gay en México, el que suele repetirse, es un joven que llega a vivir a una ciudad grande y relata –en primera persona– sus experiencias sexuales con otros hombres, el consumo de drogas, fiestas, sus emociones crudas y su vivencia al límite”, finalizó.