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| Xalapa, Ver. | 16 Ago 2024 - 00:26hrs

Carlos Hugo Hermida Rosales

Xalapa, Ver., 16/08/2024. “La población indígena del país tiene el derecho humano de ejercer su lengua y cultura, pero el modelo educativo nacional es homogéneo y pocas veces toma en cuenta la pluralidad de saberes, pues en el fondo prevalece la idea de que la diversidad es un problema”, mencionó Juan Gregorio Regino, de la Dirección General de Educación Superior Universitaria e Intercultural.

En su visita a la Universidad Veracruzana (UV), el poeta representante de la literatura mazateca comentó que el sistema educativo presenta un rezago importante hacia la población indígena y afroamericana, y no incluye la pertinencia lingüística y cultural que demanda.

Gregorio Regino urgió a reconocer que los pueblos originarios poseen sus propios modelos educativos que difieren mucho de los institucionales planificados, porque tienen una idiosincrasia particular.

La cosmovisión indígena es rica y variada; la cultura totonaca asegura que cada cosa existente cuenta con un protector, la huasteca divide al universo en planos que se comunican entre sí a través de árboles, y la tarasca considera elementos esenciales a los animales y a los ciclos naturales.

Todas ellas promueven el agradecimiento a la tierra y la ven como una entidad viva.

Explicó que las poblaciones originarias generalmente son sociedades ágrafas –no escriben– y transmiten el conocimiento de forma oral, el cual tiene un gran valor y nutriría en buena medida al sistema educativo nacional.

“Aportaría un conjunto de saberes inmenso, además de una cultura de respeto, intercambio, valoración de lo otro, reciprocidad y convivencia”, puntualizó.

Gregorio Regino afirmó que las comunidades indígenas han tomado conciencia de que no sólo son receptoras, también son portadoras de conocimiento útil para integrarse al sistema educativo.

Declaró que para apoyar la revalorización de estos saberes, las universidades deben formar un vínculo estrecho con las poblaciones nativas e impulsar la investigación científica desde allí.

“Ello permitiría que emerjan saberes infravalorados, catalogados como tradicionales y empíricos”, manifestó.
El poeta enfatizó que las instituciones de educación superior tienen la capacidad de trazar programas con el objetivo de incorporar el conocimiento indígena a la sociedad.